Ejecutivos de Coinbase, incluidos el consejero delegado Brian Armstrong y la directora financiera Alesia Haas, han sido demandados en una demanda colectiva por retrasar intencionadamente la divulgación de una grave violación de datos y por no revelar importantes infracciones normativas en sus operaciones en el Reino Unido.
Brady Nessler ha presentado una demanda ante el Tribunal de Distrito de Estados Unidos para el Distrito Este de Pensilvania con el objetivo de obtener una compensación económica para los accionistas que sufrieron pérdidas significativas debido a lo que denomina falta de transparencia.
La demanda representa a todos aquellos accionistas que compraron acciones de Coinbase (COIN) entre el 14 de abril de 2021 y el 14 de mayo de 2025. La acusación principal alega que Coinbase ocultó información vital sobre una violación de datos.
Los ciberdelincuentes, que lograron robar datos sensibles de clientes de Coinbase, intentaron extorsionar a la compañía por 20 millones de dólares. Según la información, los datos se habrían obtenido sobornando a empleados de soporte técnico en el extranjero.
"Como resultado de los actos ilícitos y omisiones de los demandados, y de la drástica caída del valor de mercado de las acciones ordinarias de la empresa, el demandante y otros miembros del grupo sufrieron pérdidas y daños significativos", declaró Brady.
Los documentos judiciales indican que Coinbase reveló la brecha el 15 de mayo de 2025, solo después de descubrirla meses antes, cuando un intento de extorsión la hizo evidente. Tras la revelación, el precio de las acciones de COIN cayó un 7,2%, cerrando a 244 dólares.
"Al conocerse la revelación, el precio de las acciones ordinarias de Coinbase descendió 19,85 dólares por acción, o un 7,2%, cerrando a 244 dólares el 15 de mayo de 2025", según la demanda.
La demanda también hace referencia a otro suceso que provocó la caída del precio de las acciones. El 25 de julio de 2024, la Autoridad de Conducta Financiera del Reino Unido (FCA) impuso una multa de 3,5 millones de libras (unos 4,5 millones de dólares) a la filial británica de Coinbase, CB Payments Ltd. (CBPL).
CBPL fue multada por violar un acuerdo de 2020 con los reguladores, que prohibía el registro de clientes de alto riesgo. La FCA reveló que CBPL permitió que 13.416 clientes de alto riesgo utilizaran sus servicios, generando casi 226 millones de dólares en transacciones de criptodivisas, a pesar de las restricciones vigentes.
La demanda alega que Coinbase engañó a los inversores sobre su integridad operativa al no revelar estos problemas regulatorios.
El demandante busca el reconocimiento de la clase, daños monetarios, el reembolso de los honorarios legales y un juicio con jurado. Coinbase no ha hecho ningún comentario público sobre la demanda presentada por Nessler.
Después del punto más bajo del 15 de mayo, COIN mostró una recuperación moderada. Según Yahoo Finanzas, el precio de las acciones de Coinbase cayó un 3,23%, o 8,79 dólares, el 23 de mayo, cerrando en 263,1 dólares.
