La agencia contra la delincuencia financiera de Kazajstán ha asestado un duro golpe a las finanzas ilícitas al desmantelar la plataforma de intercambio de criptomonedas RAKS, acusada de blanquear millones de dólares a través de los mercados de la red oscura.
Las autoridades congelaron 67 monederos que contenían cerca de 10 millones de USDT y vincularon la plataforma a un impresionante flujo de transacciones ilícitas por un total de 224 millones de dólares.
El fin de una conducta ilícita
La acción contra RAKS es el último acontecimiento en una serie de esfuerzos globales para cerrar los mercados de criptomonedas de la web oscura. A principios de este año, el Departamento de Justicia (DOJ) y Europol ya habían colaborado para desmantelar uno de los mayores mercados de la darknet basado en Monero. Además, las autoridades, con la ayuda de Binance, cerraron uno de los mayores mercados de fentanilo de la dark web.
RAKS llevaba tres años operando en secreto. Los investigadores informan de que el intercambio colaboraba con más de 200 'drug shops' y 20 de los mayores mercados de la darknet.
Kazajstán acaba de cerrar el notorio servicio de criptodivisas Raks Exchange. Esta plataforma era una de las favoritas del hampa y cooperaba con 20 de los principales mercados de la darknet, con más de 5 millones de usuarios. Las autoridades afirman que se trataba de un "control financiero" -otros lo llaman censura digital-, ha declarado Solix Trading on X.
🚫✴️🇰🇿 Kazajistán acaba de cerrar el notorio servicio de criptomonedas Raks Exchange.
- Solix Trading (@Solix_Trade) 29 de septiembre de 2025
Esta plataforma era una de las favoritas en el submundo criminal, asociándose con 20 de los principales mercados de la Darknet con más de 5M de usuarios 😈. Las autoridades afirman que se trata de 'vigilancia financiera' - otros lo llaman digital...
Aunque la agencia no facilitó nombres concretos, el contexto del ecosistema apunta a conocidas plataformas en ruso surgidas tras el vacío dejado por Hydra en 2022, como Mega, Blacksprut, Solaris, Kraken y OMG!OMG!.
Las señales de un colapso inminente ya habían surgido antes de la intervención de las fuerzas de seguridad. Las cuentas de RAKS en las redes sociales habían desaparecido, el servicio de atención al cliente había dejado de funcionar y en los foros se habían denunciado bonos impagados. Los observadores consideran ahora estos hechos como claras señales de alarma de su desaparición.
A diferencia de las plataformas reguladas, RAKS nunca ha revelado su propiedad, licencias o auditorías, y no se han encontrado pruebas de asociaciones con empresas legítimas. Sus únicas "afiliaciones" serían con mercados de la darknet, que confiaban en la bolsa para el blanqueo de dinero y la liquidez.
El caso de RAKS pone de relieve un viejo patrón: las bolsas de criptomonedas en la sombra parecen estables pero actúan como conductos para mercados ilegales. Una vez descubiertas, se desvanecen en el aire, dejando a los usuarios sin acceso a los fondos y a los reguladores tratando de rastrear los flujos.
El bloqueo de RAKS sigue la tendencia más amplia de centrarse en los intercambios ilícitos en Eurasia, que han explotado la demanda de canales de blanqueo que surgió tras el cierre de Hydra en 2022.