Las redes P2P son fundamentales para las aplicaciones Web3. Los sistemas P2P son descentralizados, ya que funcionan sin una autoridad central (sin banco ni servidor). En su lugar, los participantes se conectan e interactúan directamente entre sí.
Los participantes en P2P se denominan nodos. Los nodos son autónomos y tienen el mismo estatus dentro del sistema. Cada par tiene la misma capacidad para validar, almacenar y transmitir datos. En los sistemas P2P, los nodos tienen funciones idénticas y no existe un nodo "maestro" al que se refieran los demás.
Bitcoin es el ejemplo más famoso. En lugar de que un administrador registre las transacciones en un libro mayor, miles de ordenadores de todo el mundo comparten esta tarea. Por tanto, es imposible falsificar una transacción. Del mismo modo, los bancos son autoridades centrales que poseen la única copia de sus registros financieros. En cambio, en una red P2P basada en blockchain, todo el mundo conserva el libro de contabilidad.
¿Cómo funcionan las redes P2P?
El modelo cliente-servidor convencional está centralizado: el cliente envía una solicitud y el servidor responde. La red P2P invierte este concepto. Los papeles de cliente y servidor se invierten.
En una red P2P, cada nodo es servidor y cliente al mismo tiempo. En otras palabras, un nodo P2P puede descargar información de otros pares y compartirla simultáneamente. La estructura de las redes P2P es similar a una malla, ya que cada nodo está conectado a muchos otros. No existe una autoridad central.
Cuantos más nodos estén conectados, más sólida será la red. Por ejemplo, el proceso de descarga de un archivo se acelera si varios pares lo comparten. Si algunos pares conectados se desconectan, la red sigue funcionando, ya que los datos son compartidos por muchos otros nodos.
Los tres tipos de redes P2P son:
Redes estructuradas
Los nodos se comunican según un protocolo definido. Siguen un método organizado para localizar y compartir archivos. La desventaja es la presencia de un nodo central que indexa todos los recursos.
Redes no estructuradas
Los nodos se unen en una red peer-to-peer sin una autoridad central, conectándose aleatoriamente sin un patrón fijo. Son fáciles de configurar y más flexibles. El problema es que consumen mucha potencia de cálculo cuando manejan un gran número de nodos.
Redes híbridas
Combinan los modelos cliente-servidor y peer-to-peer. Un servidor central mantiene una lista de pares y se establece una conexión P2P para el intercambio directo de datos. Skype, en sus primeros años, utilizó este modelo.
La importancia del P2P en la Web3
Las numerosas ventajas de los sistemas P2P los hacen cruciales para las tecnologías blockchain y Web3:
- Sin punto central de fallo: la red sigue operativa aunque muchos nodos se desconecten.
- Resistencia a la censura: no hay ninguna autoridad que pueda bloquear la red o las transacciones.
- Eficiencia de costes: no se necesitan costosos servidores ni complejos sistemas operativos.
- Escalabilidad sencilla: la adición de pares mejora el rendimiento.
- Seguridad: las reglas de consenso y cifrado protegen el sistema.
Las redes P2P son, por tanto, una opción natural para las criptomonedas, los servicios de almacenamiento descentralizados como IPFS y numerosas aplicaciones descentralizadas.
Los límites de las redes P2P
La misma descentralización que hace que las redes P2P sean deseables también causa varios problemas. El malware de un ordenador puede propagarse a otros. Además, los contenidos digitales protegidos por derechos de autor se copian y comparten con facilidad, en ausencia de una autoridad central que los regule.
Otro problema es el forking, cuando las comunidades se dividen y desarrollan diferentes versiones de la red. Ethereum, por ejemplo, se dividió en Ethereum (ETH) y Ethereum Proof-of-Work (ETHW) después de que una facción siguiera su propio camino. Otra amenaza son los free-riders, es decir, usuarios que se aprovechan de los recursos sin contribuir.
¿Es seguro el comercio P2P de criptomonedas?
El comercio P2P de criptomonedas conecta directamente a compradores y vendedores, que interactúan a través de intercambios descentralizados o mercados P2P dedicados. Estas plataformas facilitan la transferencia directa de fondos entre las partes. Algunas utilizan contratos de custodia inteligentes que retienen los fondos hasta que se cumplen las condiciones.
Las ventajas son considerables: sin comisiones, precios flexibles y sin intermediarios. Pero también existen riesgos: la liquidez suele ser menor que en los intercambios centralizados y los estafadores pueden aprovechar herramientas como las devoluciones de cargos para cancelar pagos.
Para operar con seguridad: utilice plataformas de confianza, favorezca las transacciones protegidas por escrow, no cancele un intercambio después del pago y guarde siempre el comprobante de pago para resolver cualquier disputa.
Conclusiones
Las redes entre pares son la base de Web3. Esta tecnología descentraliza los sistemas eliminando intermediarios, reduciendo costes y aumentando la seguridad y la resistencia. A pesar de problemas como el malware y las estafas, el P2P sigue siendo una fuerza positiva en el mundo digital.
Los conceptos P2P han dado lugar a algunos de los inventos más revolucionarios en la forma en que compartimos, intercambiamos y nos conectamos en línea. Desde el Bitcoin hasta las aplicaciones descentralizadas, el P2P es parte integrante de la Web3 y seguirá siéndolo durante mucho tiempo.
El P2P sigue siendo una fuerza positiva en el mundo digital.