Una nueva propuesta on-chain para World Liberty Financial (WLFI) ha sido lanzada recientemente y contempla la aplicación de un mecanismo de buyback and burn sobre las comisiones de tesorería.
La nueva política de recompensas de estaca prevé que el 100% de las comisiones de liquidez se utilicen para comprar tokens WLFI en el mercado, que luego se quemar permanentemente en la cadena
a través de múltiples blockchains.
El objetivo es convertir los flujos de ingresos de la tesorería en una presión de compra constante, mientras que la reducción de la oferta de tokens teóricamente debería impulsar el precio al alza con el tiempo.
¿Puede el mecanismo de quema y recompra hacer subir el precio de los WLFIs?
La recompra y quema es por naturaleza un mecanismo deflacionista. Las tasas de tesorería se convierten automáticamente en demanda directa del mercado, mientras que las quemas eliminan permanentemente fichas de la oferta. En igualdad de condiciones, los precios tienden a subir cuando se reduce la oferta, siempre que no caiga la demanda.

Naturalmente, tutto dipende dalla performance del tesoro. Cuantas más comisiones pueda recaudar, mayor será el impacto sobre la oferta circulante y el precio del WLFI. Por el contrario, los flujos de comisiones pequeños e irregulares tendrán poco efecto sobre la presión al alza. El mecanismo sólo será relevante si la tesorería es capaz de generar flujos consistentes y regulares.
WLFI bajo presión
El token WLFI ha estado bajo presión hasta ahora. Los riesgos de gobernanza, la excesiva centralización por parte de Justin Sun y las polémicas relacionadas han minado el sentimiento desde su lanzamiento. En el momento de escribir estas líneas, el precio de WLFI se sitúa en 0,1996$, un 40% por debajo de su máximo histórico anterior.

Recompra: ¿catalizador o riesgo?
Las propuestas de recompra suelen actuar como catalizadores, pero no están exentas de divisiones. Aunque pueden crear valor, algunos analistas sostienen que las recompras de criptomonedas destruyen valor, ya que queman recursos que podrían invertirse en desarrollo, crecimiento del ecosistema, captación de usuarios, etc.
Con una regulación aún poco clara, justificar estas recompras será más difícil. Mientras tanto, los inversores minoristas demandan tokens más transparentes, similares a las acciones, que puedan ofrecer rentabilidad pasiva a los titulares a largo plazo.
Análisis técnico: ¿posibilidad de una subida del 50%?
Técnicamente, un analista de X informa de que WLFI se está consolidando en una cuña descendente, un típico patrón de inversión alcista. En el caso de una ruptura confirmada, los objetivos prevén un alza de hasta un 50% hacia los 0,26 dólares.
"Una ruptura fuerte por encima de este punto de referencia podría desencadenar un repunte a corto plazo del 30-40%, con volúmenes crecientes que confirmarían el impulso: ¡una oportunidad para seguir de cerca!", dijo CryptoBull en X.
#WLFI está probando la zona de valor del PdC tras salirse del canal bajista descendente en plazos inferiores. Una fuerte ruptura por encima de este PdC podría desencadenar un rally del 30-40% a corto plazo, con un volumen al alza que confirmaría el impulso: ¡hay que vigilarlo de cerca! $WLFI #WLFIUSDT pic.twitter.com/Il4efjkf7O
- CryptoBull_360 (@CryptoBull_360) 10 de septiembre de 2025
Otros comentarios basados en gráficos señalan que WLFI ya habría rompido un canal descendente bajista< en los plazos menores y estaría volviendo a testear la zona de valor del Punto de Control (PoC). Si los compradores consiguen cerrar por encima de la resistencia y mantener los volúmenes de negociación, la confirmación de la ruptura podría allanar el camino para una reversión alcista.
Conclusión
World Liberty Financial (WLFI) ha iniciado por tanto una propuesta en la cadena para implementar un mecanismo de recompra y quema basado en las comisiones de tesorería. Las comisiones recaudadas se gastan inmediatamente en el mercado para comprar tokens y luego se queman, reduciendo permanentemente la oferta.
Si los flujos de tesorería se mantienen constantes, esto se traducirá en una presión de compra continua y una posible subida de precios. Sin embargo, las recompras siguen siendo una práctica controvertida: se necesita más transparencia y claridad en la gobernanza para mitigar los riesgos y convencer al mercado.