La empresa de tokenización inmobiliaria RealT,ha sido demandadapor ofrecer participaciones en la propiedad de decenas de viviendas en Detroit que, al parecer, nunca llegó a comprar.
RealT había afirmado que tokenizaría participaciones en numerosas propiedades de Detroit, pero ahora ha sido demandada por ofrecerlas a la venta sin llegar a completar la compra.
¿Una dura llamada de atención para las RWA?
Según las fuentes, RealT vendió participaciones simbólicas de 39 propiedades situadas en el barrio Eastside de Detroit, prometiendo a los titulares de las participaciones una renta de alquiler.
De las ofertas que recibió, RealT habría recaudado 2,72 millones de dólares, más del doble del precio total solicitado de 1,1 millones de dólares por todas las propiedades, pero en realidad nunca llegó a finalizar la compra de las viviendas.
En declaraciones a la prensa, un inversor anónimo afirmó que la situación se asemeja a "un esquema Ponzi o Madoff", y añadió: "Si esto es cierto, todo el concepto de Real World Asset carece de sentido. Voy a retirar todas mis inversiones de RealT.'
Las investigaciones han revelado más de 20 casos similares, mientras que las 39 propiedades mencionadas podrían formar parte de un esquema aún mayor. La ciudad de Detroit ya había interpuesto una demanda contra RealT por infracciones de construcción y fiscales en 408 propiedades de su cartera.
RealT posee efectivamente cientos de viviendas en Detroit. Sin embargo, muchas de ellas están vacías, deterioradas o sujetas al control de alquileres (que impone límites a los alquileres a menudo artificialmente bajos, lo que reduce drásticamente los ingresos reales de los tenedores de fichas), y tienen tasas de desocupación hasta 10 veces superiores a las anunciadas.
¿Una amenaza para el futuro de las RWA?
Las crecientes preocupaciones sobre RealT están alimentando el debate en curso sobre la sostenibilidad real de los rendimientos generados por RWA inmobiliarios.
Gestionar decenas de miles de propiedades -muchas de ellas problemáticas- en mercados inmobiliarios competitivos y altamente regulados como el de Detroit, requiere conocimiento local y un mantenimiento constante de los inmuebles: aspectos que parecen haberse descuidado en favor de reclutar únicamente a criptoinversores.
Los inversores temen que los rendimientos prometidos se hayan cubierto con fondos de nuevos inversores, en una estructura similar a un esquema Ponzi, con poco o ningún sustento real de ingresos por alquiler.
El sector más amplio de las RWA, que ha atraído miles de millones en capital incluso durante los mercados bajistas de criptomonedas, se basa en la promesa de una red de seguridad real basada en activos inmobiliarios.
Pero el escándalo de RealT ya está planteando preguntas sobre cómo pueden afectar concretamente los riesgos operativos y regulatorios asociados con la unión de blockchain y el mercado inmobiliario.
Por ahora, el mercado está adoptando un enfoque de esperar y ver, mientras que los reguladores, inversores y observadores de la industria RWA siguen de cerca las consecuencias de este primer y serio caso de prueba para la solidez y la innovación en el mercado inmobiliario tokenizado.